Estampado

¿En qué consiste?

Consiste en untar con pintura una superficie y después, mediante presión, reproducirla en un soporte. Esta técnica se puede realizar a partir de los 30 meses, adecuando las herramientas y el material a esta edad y cambiándolas a medida que el niño o la niña van adquiriendo destrezas, asimila normas, etc.

Se pueden utilizar diferentes herramientas como esponjas, tapones de corcho, armazones de celo, patatas crudas, etc. Algunos de estos pueden ser manipulados previamente por el educador o educadora para obtener una forma determinada, como la esponja y la patata, dando formas variadas para ser utilizadas a modo de tampón.

¿Qué variantes podemos encontrar?

Se pueden elaborar sellos con distintos materiales como:

– Patata.

– Cartón.

– Rodillos.

– Cinta adhesiva.

– Globos.

– Tubos de papel higiénico.

– Fruta.

– Hojas.

– Burbujas de jabón con color.

– Plásticos, etc.

Otro aspecto a destacar es que no siempre hay que utilizar pintura para dichas estampaciones, ya que podemos utilizar otros materiales de la vida cotidiana como: el café, colorante, agua de cocción de algunos alimentos, etc.

Pasos para realizarla

En primer lugar, hay que realizar un tampón casero que consiste en llenar una bandeja con papel higiénico o esponja y verter la pintura en ella para que la absorba. Por otra parte, realizaremos los sellos de estampación de distintos materiales (véase variantes).

Para llevar a cabo dicha actividad, hay que coger el sello, mojarlo en el tampón y finalmente estamparlo en los materiales que se hayan seleccionado (papel, tela, cartón y plástico).

Aspectos fundamentales

Las impresiones para llevarlas a cabo con éxito, deben realizarse siempre mojando primero el sello en un tampón, y no directamente sobre la pintura.